El dinero es tóxico”, me dijo -enfático- un amigo escritor el mismo día que en el blog de un trotamundos me encontré con esta frase del escritor noruego Arne Garborg: “Dicen que el dinero lo da todo. No es verdad. Se puede comprar alimento, pero no el apetito; medicinas, pero no la salud; un lecho cómodo, pero no el sueño; conocimientos, pero no la inteligencia; apariencias, pero no el bienestar; diversión, pero no el placer; conocidos, pero no la amistad; sirvientes, pero no fidelidad; cabellos canos, pero no el honor; días tranquilos, pero no la paz; Con dinero se puede comprar la cáscara de todo, pero no el grano. Eso no lo da el dinero.”
El dinero es una de las primeras motivaciones para asesinar, el dinero; es la causa de los reclamos que hacen los trabajadores mal pagados o estafados; por dinero finalmente terminan discutiendo las parejas que empezaron amándose.
..no querría que intoxique este blog,
El dinero no me hará perder la elegancia porque el dinero no la compra.
Me quedo con el pensamiento de Garborg sin perder de vista su sentido práctico. El del dinero, digo.